"Jornada 2" Grecia - República checa.

La República Checa sale a flote
La República Checa se redimió de su triste actuación frente a la potente Rusia al vencer a Grecia por 2-1. Dos tantos muy tempraneros de Jirácek y Pilar le valieron al cuadro dirigido por Michal Bílek para sumar los primeros tres puntos del campeonato. Tristemente, el gol de Gekas no le sirvió a los helenos para remontar, puesto que no lograron batir de nuevo al patoso Cech.
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La República Checa dejó mucho que desear en el encuentro de la primera jornada de la fase de grupos frente a Rusia. La selección rojiza se mostró muy imprecisa, irreconocible y totalmente vulnerable en todos los flancos, puesto que acabó encajando cuatro dianas que la ridiculizaron ante toda Europa. Sin embargo, bien es cierto que el resultado no sólo reflejó el demérito de los checos, sino también la potencia y la buena planta del conjunto ruso. Sea como fuere, tras semejante humillación, los hombres de Michal Bílek consiguieron mostrar su mejor cara frente a la mermada Grecia, que se presentaba al duelo con las bajas de Avraam Papadopoulos por lesión y de Papastathopoulos por sanción.

De hecho, apenas necesitó dos minutos la escuadra Cesti Ivi para demostrar que el tropiezo inicial no había causado ningún trauma irreparable. Y es que, pasados los primeros 120 segundos, Hübschmann se hizo con un balón en el centro del campo. Muy astuto, el centrocampista se percató de que Jiráček le tiraba la diagonal entre las líneas defensivas helenas. No lo dudó el medio; le colocó el balón entre dos zagueros para dejarle completamente sólo frente a Chalkias y el ariete transformó con una sorprendente parsimonia. Bien pronto se deshacía de la tensión el conjunto rojizo.

Aun así, no contentos con el tanto inicial, los futbolistas checos se lanzaron a por un segundo gol tranquilizador, una diana que llegaría escasos minutos después gracias a la persistencia de los pupilos de Bílek y al desconcierto del cuadro griego. Tras una gran combinación conjunta, Rosicky habilitó a Gebre Selassie. El lateral diestro avanzó metros y, junto a la línea de fondo, lanzó un pase de la muerte que el meta heleno no supo atajar. Semejante error habilitó a Pilar, que transformó el centro en el segundo gol de la tarde.

Todo parecía apuntar entonces que el conjunto centroeuropeo vapulearía a los hombres de Fernando Santos. Aun así, el éxtasis inicial dio paso a unos minutos de calma absoluta en una y otra portería, aunque el peso del partido lo siguió llevando la República Checa y más concretamente Rosicky. De hecho, los jugadores griegos no protagonizaron siquiera una acción de peligro en todo el primer tiempo. Pero en la reanudación, Bílek dejó en el banquillo a Rosicky para que no viera la segunda tarjeta amarilla. Y como era de esperar, semejante decisión se volvió en su contra ya en los primeros compases del segundo tiempo, puesto que Grecia se haría con el dominio del balón y del encuentro.

Y es que cuando tan solo se habían disputado siete minutos del segundo tiempo, Gekas recortó distancias tras un fallo garrafal de Cech, al que se le escapó un balón de las manos. Se volcó en ataque el cuadro blanco. Tristemente para su suerte, no lograría el tanto del empate pese a acechar la meta del arquero checo durante gran parte del segundo tiempo. De este modo, la República Checa se recuperó así de su triste actuación ante Rusia y sumó los primeros tres puntos del campeonato. Su próximo rival será la anfitriona, Polonia. ¿Logrará el pase a los cuartos de final el combinado checo?